Lecturas jurásicas (II)

¿Quién es Stalin? pregunta un inspector a un alumno durante un examen oficial en una escuela de algún lugar de la URSS. El niño, a quien de antemano le han ordenado decir las respuestas, contesta sin titubear: Stalin es mi padre¿Y quién es tu madre? prosigue preguntando el inspector. Mi madre es el Estado, responde el alumno. ¿Qué quieres ser de mayor? Ante esa pregunta el niño titubea y, en lugar de responder según el guion impuesto, ser un trabajador disciplinado y leal a la patria del proletariado, contesta valientemente: ¡Quiero ser huérfano!

Bajo la tiranía comunista es frecuente que las personas adopten lo que Hannah Arendt definió como una personalidad totalitaria: “el ser humano completamente aislado que, sin otros lazos sociales con la familia, los amigos o los simples conocidos, deriva su sensación de ocupar un lugar en el mundo únicamente a partir de su pertenencia a un movimiento, de su afiliación a un partido”.

Los planes bolcheviques en la Europa de la posguerra mundial fueron presentados nítidamente a la Komintern por su secretario general, camarada Dimitroff: “Para asegurar la Revolución comunista y la posición preeminente del proletariado, los niños en los que aún no han arraigado las progresivas ideologías del marxismo y del leninismo, deben ser alejados de todas aquellas influencias a las que están expuestos en el ambiente capitalista que hasta ahora les ha rodeado. Por este motivo, serán sometidos a una educación del Estado en los vastos territorios que ya han sido liberados desde la Revolución de Octubre. No llegarán a conocer todos aquellos nocivos conceptos e ideas que se les quería inculcar en la antigua Europa de la burguesía, y si ya los hubieran aprendido, volverán a olvidarlos”.

Tras una interrupción motivada por la ensordecedora y desenfrenada ovación del auditorio, el orador continuó con voz estentórea: “Además, las madres de esos niños y también aquellas mujeres que aún no son madres, serán alejadas de la dañina influencia del mundo de la ideología burguesa del Oeste de Europa, para darles ocasión de participar de la reconstrucción del socialismo en los territorios que siempre han constituido la patria del proletariado internacional. Allí formarán columnas de trabajo colectivas. Respecto a los hombres, éstos lucharán con el arma al brazo por la futura unión mundial de las Repúblicas Socialistas Soviéticas. Y esto tendrán que hacerlo incluso aquellos que todavía no se han percatado de que este es el único camino para la liberalización de la humanidad. Si uno de estos hombres intentara traicionar nuestra causa negándose a luchar contra el capitalismo mundial, nosotros sabremos hacer que sufra las consecuencias de tal locura”. Sonoros y prolongados aplausos.

¡Qué viejas resultan aquellas recientes palabras de la ministra de Educación, Celaá, afirmando que los hijos son del Estado! ¡Cómo inquietan a unos padres que vemos cómo el Estado pretende asumir el monopolio docente! Una clara usurpación de funciones estrictamente parentales, que entraña consecuencias letales por la intromisión ideológica que supone en espacios propios de la personalidad del individuo.

Artículo publicado por Raúl Mayoral Benito en el diario digital El Imparcial el 18 de abril de 2021. https://www.elimparcial.es/noticia/224492/opinion/lecturas-jurasicas-ii.html

1 comentario en “Lecturas jurásicas (II)

  1. Carmelo

    Conforme leía tu artículo, Raúl, me venía a la cabeza las declaraciones de esta señora, Celaa, en relación a que los hijos son del estado, mayor aberración no cabe en una mente tan perversa y corrompida como la de estos miserables.

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